Drácula en el Fernán Gómez

Imaginemos por un momento que Drácula ha sobrevivido hasta el 2020 y que es una estrella de rock que transita por la noche madrileña. Imaginemos que ante el último aliento…como dicen que ocurre, pasa su vida de casi 600 años por su mente, como una película…Imaginemos que toda esa existencia de 6 siglos es convierte en un teaser que va dando saltos en el tiempo, del pasado al presente… Imaginemos que, en un teatro, se cruzan esos tiempos y esas realidades o… ensoñaciones. Pues aunque tenga una estructura cinematográfica la pieza, es una obra de teatro en esencia, esencialmente teatral. De nuevo, tras el Wilde que estrenó hace unos meses en el Teatro Lara, Ramón Paso, con su joven compañía a la que se han sumado profesionales de la talla de Jacobo Dicenta, convierte una historia compleja en todos sus sentidos, en un viaje sensorial y fantástico que mantiene al público atrapado durante más de dos horas en su butaca. Teatro en el juego espacial, en las elipsis narrativas, en la interpretación de todos los componentes del reparto… Si vienen autobuses a ver musicales a Madrid, deberían también acudir a ver este Drácula que pone alto el listón del teatro para todo tipo de público.
Adolfo Simón