Maui es una feria
Maui es una flamenca de las modernas, pero no por eso pierde esa esencia que tiene el ser flamenco, ese estado único al que solo llegan ciertas personas que irradian un «duende» difícil de explicar con palabras. A Maui hay que ir a descubrirla y ver su expresividad contenida y su genio singular sobre las tablas. Sus canciones llegan más cuando se la ve en directo, en calentito con su traje y su corona de modern gipsy queen. Ni farolillos ni macetas de geranios hacen falta para que el torbellino interpretativo de su alma te llegue al corazón. Una musa, sobrina de Bambino e hija del guitarrista y compositor Miguel Ramírez que lleva por todo lo alto la estirpe heredada.
Una flamenca de pura cepa, que además toca el chelo y lo que se le ponga por delante, que para eso sabe colorear con nuevos tintes su herencia flamenca.
Maui estará en el Galileo Teatro los viernes hasta el 24 de marzo con sus amigos, artistas invitados como Rosario, Martirio, Jorge Pardo, Fernando Tejero o Carmen Paris. Disfrútenla.
Luis Mª García.
Mis problemas con la comida de Angélica Liddell en Galileo Teatro
El teatro de Angélica Liddell está lleno de imagenes y rabia. Alude a un tiempo y circunstancias concretos pero a la vez, se sumerge en las miserias y fantasmas eternos de la humanidad. Es complicado abordar un texto de esta autora intentando darle una lectura personal, es una lucha titánica siempre. Esperanza Pedreño apuesta por crear una visión paralela a la de la autora, buscando componer un subrayado escénico sobre lo que el texto le afecta y le provoca. Los lenguajes contemporáneos nos tienen acostumbrados a varios planos de discurso al tiempo en el escenario. Aquí, la palabra de la Liddell se ensambla con la plasticidad que el cuerpo y juego teatral propone la actriz.
Adolfo Simón
Que Revienten los Artistas 
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