La llamada en el Teatro Lara
Los campamentos son lugares peligrosos, casi nunca sirven para educarse, más bien son ocasiones para tener la oportunidad de vivir otras experiencias en el despertar a la vida. En La Llamada, un peculiar musical que ya se presentó la temporada anterior y que vuelve con bastante respuesta del público, el teatro estaba lleno hasta la bandera en la función a la que asistí. Y para deleitar a los espectadores que gustan de funciones golfas y con música en directo, han transformado el patio de butacas del teatro para convertirlo en un espacio real que conecta con el más allá. Siempre apetece ver que se trastocan los entes de poder, sea el núcleo familiar o la santa madre iglesia que aquí, es parodiada con acierto gracias a las dos monjas enloquecidas que dirigen el campamento y entre las que destaca el trabajo de la veterana Gracia Olayo. El resto de elementos, ambientación, música y voces ayudan a contar esta locuaz historia de apariciones en la adolescencia.
Adolfo Simón


Deja un comentario