El BNE nos deja buen sabor de boca… y ganas de ver más.
El programa «Clásicos de la Danza Española» apadrinado por Antonio Najarro que hemos podido ver en el Teatro de la Zarzuela nos ha traído un poco de todo y nos ha dejado con ganas de más. De más escuela bolera, de más farruca y de más jota aragonesa. Los bailarines han sabido recuperar, de la mano de su director y de los colaboradores, una obra que será difícil de ver en el futuro. Las obras rescatadas en esta ocasión han sido «Paso a cuatro» de Antonio Ruiz Soler, representando a la escuela bolera que a mediados de los 50 fue recuperada por el ballet de Antonio y que ha quedado bien desempolvada y brillante. La «Farruca» de Juan Quintero quizás adolecía un poco de anticuada y «ya vista» puesto que es una obra que se adapta al flamenco más puro, más académico y que debería verse más actualizado. Carmen Cubillo recuperó el «Viva Navarra» de Victoria Eugenia con muy buenas intenciones y dando lo mejor de sí misma a pesar de que los años no pasan en balde y le costó recuperar la técnica. Para finalizar la primera parte la «Jota de la Dolores» dejó un buen sabor de boca y algunas lágrimas de emoción entre el público con el ballet a toda mecha.
En la segunda parte se recuperó «Medea», obra dramática y puntera en su época con la música de Manolo Sanlucar y que nos volvió a fascinar por su capacidad para transmitir la narración gracias a la dramaturgia de Miguel Narros. En esta ocasión ha sido Maribel Gallardo, que ya interpretó a la novia, la que ha dado fin a las representaciones de Madrid y que ha dejado el listón alto a pesar de tener a Lola Greco por delante.
Alguien dijo que es necesario conocer el pasado para enfrentarse al futuro y parecer ser que esta es la premisa de Najarro al querer recuperar, en este programa tan amplio, estas pequeñas joyas del BNE, así que esperemos que esta labor de recopilación continúe y nos estimule para crear de nuevo grandes obras maestras.
Luis Mª García Grande
Deja una respuesta