¿Qué es el teatro para ti?…
Creo que es el espejo oscuro en el que los seres humanos necesitamos mirarnos. Es ese mirador en donde venimos a mirar y a mirarnos. Jorge Luis Borges al intentar definir el oficio del actor decía que se trataba de alguien que juega a ser otro ante un concurso de personas que también juega a tomarlo por ese otro. El teatro es ese espacio maravilloso que autoriza estos mecanismos de denegación en donde lo real y lo ficticio se dan en un mismo soporte. Ese lugar que implica un aquí y un ahora pero para hablar de otro lugar y otro tiempo.

¿Cómo surgió que escribieses teatro?…
Empecé a escribir durante mi clandestinidad cuando tenía veinticuatro años, es decir en el período en que estuve sin documentos en Francia. Por ese entonces tenía miedo de que la policía me sorprendiera en las calles de París y que me obligara a regresar a mi país de origen a donde no quería volver. Entonces decidí encerrarme y no salir a la calle. En esa situación lo único que podía hacer era leer. Y fue lo que hice hasta que un día decidí empezar a escribir. Sin esta experiencia de la clandestinidad y del encierro, creo que nunca habría empezado a escribir.

¿Por qué escribes teatro?…
Porque es lo único que sé hacer. Porque es lo que permite combatir la soledad. Porque cuando escribo le pierdo el miedo a la muerte, a la enfermedad, a la desaparición, al sufrimiento. Porque es lo que me permite reencontrarme con mi lengua materna que es el español y con la que solo me encuentro en las sesiones de escritura.

¿Cómo surge el texto de Kassandra?…
Surgió en una estadía que tuve en Atenas a donde fui invitado para el estreno de una pieza mía llamada Slaughter. Tuve que pasar varios días en la capital griega y estaba muy solo. Una mañana me desperté y me dije que lo único que podía tener en común con Esquilo, Sófocles y Eurípides era escribir una pieza de teatro en Atenas. Y entonces como solo me quedaban dos días, decidí salir bien temprano a caminar con un mapa de la ciudad en la mano e ir escribiendo en las calles del mapa todo lo que se me iría ocurriendo en las calles reales del itinerario. Poco a poco el mapa empezó a quedar oscuro de texto. A la noche cuando regresé al hotel, tenía casi toda la pieza escrita en el mapa. Y era un monólogo. Y escrito en inglés que es una lengua que desconozco en absoluto. En cierta manera es una pieza que me fue dictada por la propia ciudad. Muchas veces digo que no es una obra que escribí en Atenas sino que es una obra que Atenas escribió en mí.

¿Hiciste algún tipo de búsqueda o documentación sobre el tema antes de empezar a escribirla?…
No. No hice ninguna búsqueda porque todo fue muy improvisado. Luego cuando ya la pasé a Word, es decir cuando la pasé del mapa a la pantalla, algunas cosas fueron cambiando, pero muy pocas. Yo quería que el monólogo – la voz de Kassandra –, tuviera el ritmo y la respiración de lo que había sido mi vagabundeo. Cuando uno lee la obra puede sentir que tiene un ritmo particular. Y para preservar ello, no toqué mucho el texto. El monólogo tiene que tener algo de vagabundeo, de deambulación, de recorrido. Pobre Kassandra, ella camina todo el tiempo por la ciudad buscando clientes, buscando la manera de sobrevivir, buscando personas a quienes contar su historia. Pobre, ¿verdad?.

¿Ha cambiado tu visión del texto a partir de la puesta en escena?
Claro. Cada puesta en escena me hace tener una visión distinta del texto. Eso es hermoso. Pero eso no me sucede solo con Kassandra. Eso también me sucede con todos mis textos. Cada puesta en escena que veo me dejo deslumbrar por la nueva visión que me va a presentar el director y su equipo de actores y técnicos. Una pieza de teatro nunca está terminada. Es siempre una pieza inconclusa. Desde un punto de vista escénico es algo completamente hueco. Es la invitación para algo que no sucederá nunca en el texto sino que sucederá en ese otro lugar que es la escena. De alguna manera cada nuevo director la va a concluir con su propia puesta en escena. Y esto es algo fascinante para mí. Eso es lo que hace que mis piezas siempre estén vivas y abiertas, siempre a la espera de que alguien venga a encarnarlas, a darles vida y a hacerlas decir muchas más cosas de las que yo he pretendido decir.

¿Qué balance haces del desarrollo de tu escritura?…
¡Ay! Eso me cuesta respondértelo. Creo que prefiero que los balances lo hagan otros. No conozco lo suficiente el desarrollo de mi escritura para darte una respuesta seria. No sé. Es posible que no me anime a hacerlo.

¿Opinas como algunos autores que no hay que publicar un texto hasta verlo estrenado?…
No. No opino eso para nada. He publicado algunas piezas mías que no se habían estrenado antes de la publicación. El texto de teatro es sin lugar a dudas la base de una representación escénica pero también es un objeto literario, y como tal es interesante que sea publicado. Leer una pieza es algo tan bello. Ir pasando las páginas. Ir hacia delante o hacia atrás. Poder detener la lectura cuando nosotros lo decidamos, por ejemplo en el momento preciso en que Romeo se va a apuñalar. Eso es algo hermoso. Uno puede detener la muerte. Eso solo se puede hacer leyendo teatro. Yo siempre defiendo la publicación ya sea antes, durante o después.

¿Qué sentido ha de tener el teatro hoy?…
El que cada uno le quiera dar. El teatro es algo que puede tener muchos sentidos o que hasta puede no tener ningún sentido. Yo adhiero mucho con lo que dice Oscar Wilde en el prólogo de El retrato de Dorian Gray: “Todo arte es perfectamente inútil”. Para mí el sentido que tiene el teatro en tanto que experiencia artística es que nos brinda un instante estético absolutamente inútil, un momento en que todo se suspende y algo imposible acontece delante nuestro. Y creo que es esa inutilidad la que lo hace algo extraordinario. Es el mundo de las naderías en donde nada es lo que es. El mundo en donde 2 más 2 puede ser 6. El mundo en donde el ser y el no ser acontecen en un mismo tiempo y espacio. ¿Qué sentido tiene el teatro? No lo sé. ¿Qué sentido tiene una manzana? ¿O una mariposa? No sabría decírtelo. ¿Qué sentido tiene el silencio de una piedra?.

Alguna sugerencia para crear en tiempos de crisis,,,
Soy malísimo sugiriendo cosas. Cada vez que sugiero algo me equivoco. A ver… Yo creo que el artista siempre está en crisis. Que no existe creación sin crisis. Pienso que el tiempo de la creación es siempre un tiempo crítico. Yo creo porque estoy mal o angustiado o porque tengo miedo de morirme. Cuando estoy feliz no me interesa ponerme a crear. En los instantes de felicidad salgo a caminar, a ver amigos o juego con mi gato durante horas. Sin embargo cuando algo me duele en Dinamarca – cuando algo entra en crisis –, entonces allí empiezo a crear.

¿Proyectos?…
Por suerte tengo muchos proyectos para los próximos dos años a venir. En este momento estoy ensayando un texto mío que se llama Ostia y que voy a estrenar yo mismo con mi hermana la actriz Roxana Blanco en Montevideo. Es un texto que está escrito para ser leído por nosotros dos. Yo no soy actor y esta es la primera vez que voy a subir a un escenario. Luego voy a poner en escena mi último texto La ira de Narciso que voy a estrenar también en Montevideo con la actuación del actor, dramaturgo y director teatral uruguayo Gabriel Calderón. A comienzos del año que viene voy a dirigir Las tres hermanas de Chejov. Y a todo eso se suma todas las giras que tenemos por América Latina y Europa con mi última puesta en escena de mi texto Tebas Land. Luego tengo también mucho trabajo de investigación, docencia y formación en las distintas universidades y escuelas en las que trabajo.
19 de abril de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: El retrato de Dorian Gray, Esquilo, Eurípides, Gabriel Calderón, Jorge Luis Borges, Kassandra, La ira de Narciso, Las tres hermanas de Chejov, Oscar Wilde, Ostia, Roxana Blanco, Sófocles, Sergio Blanco, Slaughter, Tebas Land | Deja un comentario
¿Cómo surge el proyecto de La Marquesa de Vadillo?…Háblanos del texto y del montaje…
A lo largo de estos 20 años de compañía la representación de Pequeñas Historias de asesinatos (cluedos) han sido una manera de mantener la estructura y al equipo, pero tambien ha sido un laboratorio de ideas y personajes. Asi, tras infinitas versiones y adaptaciones decidimos hacer un Homenaje a todos esos actores y actrices que habían pasado por la función. A partir de ahí surgen situaciones y anécdotas que son el embrión del texto. Con la ayuda de Felix Estaire afrontamos la dramaturgia sin complejos ni miedos.

¿Hubo ocasión durante el proceso para que los actores aportasen ideas en el texto o en la puesta en escena?…¿Cómo ha sido el trabajo con ellos?…
Intenso. Grato. Duro. Sorprendente. Si es verdad que cuando escribíamos era para un elenco ya confeccionado. Y eso ha ayudado mucho. Son 9 en escena. El trabajo se afrontó desde el texto, pero abierto durante el proceso a cosas que surjan en el ensayo o aportaciones de los actores. Este trabajo no se podria afrontar de no tener un equipo artístico estable que ha favorecido mucho el resultado de la obra.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que has partido para crear esta obra?…
Si. De teatro : El Espíritu Burlón o Viaje a ninguna parte, otros como: La princesa prometida , Noviembre , Ser o no ser…sobre todo para tener referentes en cuanto a una estructura dramática.

¿Por qué haces teatro?…
Porque es una necesidad.
¿Qué balances haces de tus trabajos como director-autor de teatro?…
Siempre es difícil hacer balance….partir de un folio en blanco y que eso termine llenando un teatro, es un subidón. Satisfecho pero ganas de más.

¿Qué función crees que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?… ¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
El Teatro ha de ser ese espacio para compartir. Para probar la vida. Para disfrutar de emociones y energías. Para volar. Para ver mecanismos. Para observar actitudes. Sin moralinas.
Sobre el Iva, pues me parece que ha arruinado parte del sector de una manera irreversible. Hay compañías, teatros, actores o actrices o regidores…que no han de volver.
¿Qué obra de teatro has visto últimamente?¿Qué te pareció?…
No voy a decir las 2 ultimas. Si la antepenúltima que es «Un Hombre con gafas de Pasta», que me fascinó.

¿Proyectos?…
Preparando gira de El Extraño caso de la Marquesa de Vadillo y El Minuto del Payaso .
En agosto dirijo una obra para una compañía gallega.
¿Cómo ves la situación teatral en nuestro país?…¿Se pueden hacer propuestas combativas hoy en día?…
La situación es muy confusa. También creo que hemos tocado fondo. Confío que las compañías, y el Teatro, vuelva a tener la presencia y la inversión que se merece.
Pues claro que si se pueden hacer propuestas combativas. La cuestión es el matiz con el que se encara.

12 de abril de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: “Viaje a ninguna parte”, El Espíritu Burlón, El Extraño caso de la Marquesa de Vadillo, El minuto del payaso, Felix Estaire, La Marquesa de Vadillo, La princesa prometida, Luis Crespo, Noviembre, Pequeñas Historias de asesinatos (cluedos), Ser o no ser, Un hombre con gafas de pasta | Deja un comentario
¿Cómo fueron vuestros inicios como Kulunka?…
Kulunka Teatro se creó en 2010 por Garbiñe Insausti y José Dault, dos jóvenes actores formados en la Resad.
Creamos la compañía para producir nuestro primer espectáculo «André y Dorine», que se estrenó en Octubre del 2010, y con el que llevamos 4 años de gira por más de 20 países.
Para ello contamos con un equipo de colaboradores de lujo, el actor Edu Cárcamo, las escenógrafas y vestuaristas Laura Eliseva Gomez e Ikerne Jimenez, la ayudantía en dirección de Rolando San Martín,
el director Iñaki Rikarte y la música de Yayo Cáceres.

¿Realizasteis otras facetas además de la actuación?…
Pese a nuestra formación, puramente actoral, tuvimos que aprender labores de producción y distribución del espectáculo: herramientas que, rara vez, forman parte del aprendizaje de un actor,y que son indispensables en la aventura de la autogestión. Las muchas horas de ensayo en la sala se vieron y se siguen viendo acompañadas
de muchas horas de trabajo frente al ordenador en casa.

¿Qué es el teatro para vosotros?…
Un lugar en el que la necesidad de contar historias se junta con la necesidad de escucharlas.
¿Por qué hacéis teatro?…
Precisamente por esa necesidad de contar historias que diviertan, emocionen y hagan sentir a quien las escucha.

¿Qué balance haríais sobre vuestra trayectoria?…
El balance ha sido sin duda positivo. Hace casi cinco años, cuando estábamos descubriendo la historia de «André y Dorine» en nuestro pequeño local, jamás pensamos que llegaríamos a recorrer más de 20 países, o a hacer temporadas en China o en Estados Unidos. El éxito de «André y Dorine» nos ha permitido además fantasear con una idea que poco a poco se esta convirtiendo en realidad: la creación de un equipo estable de trabajo.

¿Cuál ha sido el recorrido de la Compañía?…
El recorrido de la compañía y el de «André y Dorine» van de la mano.
Kulunka Teatro se creó para dar vida a «André y Dorine». En estos cuatro años de gira hemos realizado casi 300 funciones, 2 temporadas en Madrid (agotando localidades), visitado 23 países, tan diversos como Estados Unidos, Rusia, China, Nepal, Francia, Argentina, Ecuador, Chile, Inglaterra…algunos de ellos como China, Turquía, Colombia o Estados Unidos en varias ocasiones.

¿Qué balance y evolución habéis hecho?…
Este ha sido nuestro primer espectáculo de máscaras y nos ha abierto las puertas a un lenguaje nuevo sin fronteras cuya capacidad de comunicación no entiende de limites culturales ni idiomaticos.
Un lenguaje con el que tratamos historias esenciales y por lo tanto universales. «André y Dorine» nos ha hecho sentir que nuestro trabajo es útil al espectador, le divierte, le emociona, y le hace sentir.
Como compañía queremos seguir en esa linea, tanto en los trabajos que realizamos con máscara como en los de texto.

¿Qué función creéis que ha de tener el teatro para la sociedad de hoy?…
El teatro es un narrador de historias, tan diversas tan distintas unas de otras que es difícil adjudicarle un único papel en la sociedad.
¿En qué proyectos habéis participado durante el último año?
Además de la extensa gira de André y Dorine, hemos estrenado el segundo espectáculo de mascaras de Kulunka Teatro, en co-producción con EszenaT (Teatro Victoria Eugenia y el Theatre National de Bayonne), en la Feria de Donosti en el Teatro Victoria Eugenia.
«Solitudes», es un espectáculo cuyo argumento reposa sobre eterna duda de si «Nunca es tarde» o si «tarde es nunca». Habla de las oportunidades perdidas, de la soledad y de la importancia de las cosas pequeñas. También nos hemos lanzado a producir un espectáculo de texto, «Taxidermia de un Gorrión», de Oscar Galán. Una interesante reflexión sobre la necesidad de los mitos en nuestra sociedad, a partir de la figura de Edith Piaf. Un espectáculo dirigido por Fernando Soto e interpretado por Alberto Huici, Lola Casamayor y Garbiñe Insausti

¿Cómo surgió la obra que presentáis en el Teatro Fernán Gómez?…Habladnos del proceso de creación y su evolución durante las funciones…
«Acabas de cumplir 82 años. Has encogido seis centímetros, no pesas más de 45 kilos y sigues siendo bella, elegante y deseable. Hace 58 años que vivimos juntos y te amo más que nunca». Así comienza «Carta a D», una maravillosa carta en forma de libro que el filósofo y periodista André Gorz escribe a su mujer, Dorine, pocos meses antes de que los dos apareciesen muertos en su casita de Vosnon, en Francia. No hubo dudas de que se trató de un suicidio compartido. La belleza de las palabras que aparecen en el libro sembró en nosotros la necesidad de contar una historia de amor en la vejez, no la biografía de los «André y Dorine» originales, sino nuestra propia historia. Mantuvimos los nombres de los personajes como homenaje.
El proceso fue relativamente corto, precedido de un tiempo de sensibilización (más que de investigación) con el tema, tras el cual reunimos al equipo en el local de ensayos en busca de la historia. Exploramos las capacidades y limitaciones comunicativas del lenguaje de la máscara. Fue nuestro primer montaje de máscaras y toda una aventura, pero en poco más de dos meses de intensivas jornadas de ensayos estrenamos la obra. Han pasado 4 años de gira y 300 funciones, y seguimos trabajando siempre que podemos en mejorar la obra, en ser más eficaces en la dramaturgia y más limpios y exactos en la partitura de acciones físicas y emocionales que componen «André y Dorine». Es una búsqueda que no tiene limite.

¿Cómo creáis los personajes?…¿Tenéis un método?…
Las máscaras son realizadas por Garbiñe Insausti y son determinantes para abordar el carácter del personaje, este proceso suele ser muy intuitivo. En ocasiones, es Garbiñe la que se adapta a la situación y crea un personaje acorde al contexto, y otras veces el carácter del personaje surge de la propia máscara. Nuestro proceso ha sido en todo momento muy intuitivo, sin otro método que el de «prueba y error».

¿Cómo creéis que están afectando los recortes y el aumento del I.V.A. a los proyectos de teatro?…¿Y a las giras?…
Es obvio que el 21% a la cultura ha afectado gravemente a todos, tanto a espectadores como a empresas. Y lo peor de todo es que aparentemente no ha cosechado los resultados recaudatorios que pretendía. Es una medida que asfixia a la industria cultural y que sólo se justifica desde cierto afán revanchista hacía la plataforma de la cultura contra la guerra de Irak, y el apoyo que algunos miembros de la industria hicieron a la campaña de Zapatero. Es triste que a menudo sólo nos equiparemos a Europa en lo malo y rara vez en lo bueno. Ninguna de las grandes potencias europeas tiene un impuesto sobre la cultura tan elevado.

¿Qué montaje que hayáis visto últimamente, os ha interesado?¿Por qué?…
Me gustaría destacar, «Un Trozo Invisible de Este Mundo» de Juan Diego Botto, dirigido por Sergio Peris-Mencheta. Por tratarse de una forma de teatro útil, que emociona y divierte. Un teatro que te hace sentir, que te remueve por dentro. Quedé especialmente impactado por la magistral interpretación de Juan Diego.

¿Proyectos?…
Este año «André y Dorine» prosigue con su gira dentro y fuera de España. Volvemos a Mexico, Alemania, China, y haremos una temporada de tres semanas en Los Angeles, Estados Unidos. Y pronto empezarán a caminar también nuestros dos nuevos proyectos, «Solitudes» y «Taxidermia de un Gorrión».
6 de abril de 2015 | Categorías: ACTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: "Carta a D", "Solitudes", "Taxidermia de un Gorrión" de Oscar Galán, "Un Trozo Invisible de Este Mundo" de Juan Diego Botto, Alberto Huici, André y Dorine, Edith Piaf, Edu Cárcamo, EszenaT (Teatro Victoria Eugenia y el Theatre National de Bayonne), Fernando Soto, Garbiñe Insausti, Iñaki Rikarte, Ikerne Jimenez, José Dault, Kulunka Teatro, Laura Eliseva Gomez, Lola Casamayor, RESAD, Rolando San Martín, Sergio Peris-Mencheta, Yayo Cáceres | Deja un comentario
¿Qué es el teatro para ti?…
El único lugar donde tengo la seguridad de que escucho y puedo ser escuchado.
¿Cómo fueron tus inicios en el teatro?…
Verás, si te soy sincero siempre he estado dentro de un teatro. Mi padre era empresario de teatro y mi madre actuó en muchísimas Revistas así que mis inicios no están muy claros si se remontan a mi niñez entrando y saliendo de los camerinos del viejo teatro Apolo de Barcelona o cuando decidí estudiar interpretación.

¿Cómo surgió que escribieses y dirigieses teatro?…
Escribir vino primero. Antes que nada soy lector. Tuve la suerte de tener un maestro que me despertó el interés por leer teatro. A todas horas leía teatro, de todo tipo. Me daba igual el estilo, la cuestión es que adoraba estar tirado en el sofá y leer sin parar. Un día, hace ya muchos años intenté escribir algo. No me gustó lo que hice pero sé que en ese error inicial se encendió en mí la pasión por la escritura. Escribir es, ante todo, tener pelotas y yo las tengo. Es exponer una parte muy íntima de ti, ponerla a la vista de todos, pero lo importante, lo realmente jodido, no es lo que piensen los demás de lo que has escrito sino lo que piensa uno mismo de lo que ha escrito. Por todo esto, escribir es pura necesidad.
Dirigir ha sido una consecuencia de la maduración personal dentro del teatro. Seguramente tenía la necesidad de dejar de pensar en mí, de olvidarme de mi culo y para ello no hay cosa mejor que pensar en un todo fuera de ti, de pensar con una consciencia fuera de tu cuerpo, que planea sobre la escena pendiente de cada pequeño detalle. Sí, dirigir me vino por la necesidad de dejar de ser el centro del universo.

¿Cómo surge el texto de El Plan?…
Hace años pasaba por una pequeña crisis existencial en la que andaba necesitado de encontrarme con mis amigos más queridos. A la vez, en un momento de éxtasis económico allá por el año 2007, veía gente a mi alrededor que no encajaba con el modelo del español de clase media de entonces, un triunfador sin miedo al futuro, que podía comprar casas, coches, vacaciones caras a la otra parte del mundo. Sencillamente me preguntaba quiénes eran aquellos que no podían hacer todas estas cosas. Un día vi una revuelta por el cierre de una fábrica de coches que trasladaba la planta a un país del este y junté todo esto con temas de actualidad. Jugué con los elementos, me divertí y sufrí a la vez y el resultado fue El plan.

Háblanos de la propuesta escénica…
La propuesta escénica actual está condicionada por el espacio en el que exhibimos El plan, La pensión de las pulgas. Es un espacio que le va como un guante al texto pues la acción transcurre en el salón de la casa de uno de los personajes. Pocos elementos pero muy característicos de un hogar en crisis. El elemento vital de la función son los actores y la necesidad del texto de ir a un hiperrealismo que hace que su presencia en escena sea mucho más contundente.

¿Hiciste algún tipo de búsqueda o documentación sobre el tema antes de empezar a escribirla?…
No, la idea final, lo que prendió la chispa fue un libro de Eduard Punset que se llama «La mente está en el cerebro». El hecho de que todos en mayor o menor medida suframos algún grado de psicopatía me resultó aterrador. Después me puse a escribir sin parar, sin detenerme, sin mirara a otra parte.

¿Cómo ha sido el proceso de escritura del texto?…
Hace años que escribí El plan. No recuerdo bien cómo fue el proceso salvo que como comentaba una vez empecé a escribir no pude parar hasta el final. Sí recuerdo que al terminar me pasé una temporada preso de la historia que yo mismo había creado.

¿Ha cambiado tu visión del texto a partir de la puesta en escena?…
No exactamente, he descubierto matices que yo mismo no había notado al escribirlo y sobre todo, dirigirlo me ha permitido hacer una especie de revisión, rescribir el texto y eso ha sido maravilloso en el sentido de que me di cuenta de que el teatro, la única razón de ser que tiene, es el de ponerlo en pie sobre las tablas, por mucho que tu obra esté publicada con anterioridad.

¿Qué balances haces de tus últimos trabajos para el teatro?…
Son tan distintos los unos de los otros que… El plan es hasta ahora la mayor satisfacción de mi vida profesional. Creo que en cierto modo me ha salvado artísticamente, puesto que sentía que desde hacía tiempo sólo trabajaba por dinero. Haber dirigido El plan me ha hecho ver que lo mío, a pesar de lo que pensaba, es vocación pura.

¿Cómo ves la creación teatral en estos momentos?…
Como siempre ha sido. Está tan viva como lo estaba antes a pesar del durísimo momento que atravesamos. Yo no paro de ver propuesta alucinantes por doquier.

¿Qué sentido ha de tener el teatro hoy?…
El de hacernos cambiar el rumbo de la vida. El teatro, más allá del entretenernos, que sin duda lo hace, ha de servir para transformar el mundo en el que vivimos. Esto no es nada nuevo, siempre fue así. Sin el teatro no habría habido cambios profundos en el pasado que ayudaran a progresar a la sociedad. De eso deberían ser más conscientes los que mandan y los políticos en general. El teatro es un bien cultural no solo por su inmenso valor educacional, sino por el extraordinario impulso transformador que supone.

¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro?…
La subida del IVA a las Artes Escénicas tiene como resultado producciones más austeras que en muchos casos resultan insuficientes para alcanzar el nivel mínimo deseable y no por la falta de talento. El gobierno debería entender que teatro siempre habrá, esté el IVA al 21% o al 298%, siempre habrá, pero el gobierno de un país serio, con aspiraciones de estar en la élite de países influyentes, debe entender que la calidad de las propuesta no depende sólo de la capacidad de artística y el talento de los creadores, también depende de las facilidades que se les dé a éstos para plasmar sus ideas. Se ha castigado injustamente al sector por razones ideológicas. Esto es lo más penoso e intolerable del tema.

Alguna sugerencia para crear en tiempos de crisis…
Crear, nada más que eso. No detenerse y crear.
¿Qué obra de teatro has visto últimamente?¿Qué te pareció?…
Lo último que he he visto fue «Por un infierno con fronteras» de Denise Despeyroux. Me pareció una de las cosas más geniales que he visto en teatro en mucho tiempo, con dos actrices sublimes, Carmela Lloret y Sara Torres, dirigidas magistralmente por la propia autora del texto, un texto que conforme lo iba escuchando en boca de las actrices me iba pareciendo más y más genial.

¿Proyectos? El 6 de abril estreno en Los Teatros del Canal otro texto mío titulado «Dignidad». Esta vez como actor, junto con Daniel Muriel dirigidos por Juan José Afonso y si todo va bien después del próximo verano estrenaré mi último texto, «Memoria o desierto» en Madrid, en el que dirigiré a un magnífico trío de actrices. Estoy, a la vez, embarcado en un nuevo texto para la nueva producción de la Fundición Sevilla. Como ves, estoy entretenido.
31 de marzo de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: "Dignidad", "La mente está en el cerebro", "Memoria o desierto", "Por un infierno con fronteras" de Denise Despeyroux., Carmela Lloret, daniel muriel, Eduard Punset, El Plan, Ignasi Vidal, JUan José Afonso, la Fundición Sevilla., La pensión de las pulgas, Sara Torres., teatro Apolo de Barcelona, Teatros del Canal | Deja un comentario
¿Cómo fueron tus inicios en la danza?¿Cómo fue surgiendo tu personal lenguaje en el escenario?…
Pertenezco a una saga de bailarinas así que me inicié en la danza a la vez que en todo lo demás. Y luego, como en todo lo demás, fui desarrollando mi propio punto de vista. Después de haber pasado gran parte de mi vida subida a un escenario, de haber bailado de muy distintas maneras y de haber participado en todo tipo de producciones tanto de danza como de teatro debo confesarte que tengo serias dudas acerca de la posibilidad de que existe realmente un lenguaje personal. El lenguaje es una convención, es algo que repetimos y copiamos constantemente. En realidad, no hay nada nuevo en lo que yo hago. Es todo una cuestión de foco y de cómo cada cual administra lo que hay pero no creo que estemos inventando lenguajes. Y es precisamente esto lo que me sigue fascinando del teatro y de la danza, que siendo lo mismo, sigue siendo pertinente realizar la ceremonia de ofrecerse a la mirada y a la presencia de los otros. Lo que nos diferencia a unos de otros es lo que perseguimos con nuestro trabajo, lo que nos mueve y lo que queremos que haga, pero eso no es una cuestión de lenguaje.

¿Qué evolución has hecho a lo largo de este tiempo? ¿Qué balance harías sobre tu trayectoria?…
Durante este tiempo simplemente he vivido. La vida, o parafraseando a Jose Luis Pardo, esa inclinación a la muerte que hace que merezca la pena vivir, es un proceso continuo de transformación y pérdida. Supongo que lo que he hecho en estos años no ha sido tanto ganar como perder, no tanto conquistar como rendirme. No me refiero a tirar la toalla, ni a agachar la cerviz, ni a aceptar imposiciones de ninguna clase, eso jamás, hablo de aceptar asumir cierta responsabilidad. Eso es lo que más ha cambiado a lo largo del tiempo. Por lo demás, creo que no hecho otra cosa que insistir sobre lo mismo, de distintas maneras, desde distintos lugares, pero siempre en la misma búsqueda.

¿Es importante tener colaboradores habituales en el equipo artístico y técnico? ¿En qué medida participan del proceso de creación?…
Lo importante es sacar adelante el proyecto que una tiene entre manos y trabajar lo más a gusto posible; si para ello conviene más repetir colaboración o encerrarse a trabajar sola o introducir agentes nuevos, es cosa de cada proyecto y de cada individuo.
Hace ya mucho tiempo que Roland Barthes se dio cuenta de que “el autor” había muerto. Esa figura inventada e impuesta por el patriarcado no me sirve para nada. Yo hago la mayor parte de mi trabajo sin nadie alrededor, es más, cuanto más lejos mejor, pero en realidad no puedo decir que trabaje sola porque estoy llena de tanta gente que si tuvieran que hacerse presente todos, entre vivos y muertos no cabrían en ninguna sala. No me creo lo de tener una voz propia, ni siquiera podría asegurar que mi cuerpo es mío. Tampoco tengo ninguna pretensión de propiedad sobre nada de lo que hago. Como todas, soy una acumulación de voces ajenas, de encarnaciones prestadas y de referencias robadas. El proceso de creación es en sí mismo una confluencia de subjetividades que me atraviesan, una superposición de cuerpos, una mezcla de espacios. Por tanto, para mí, un proceso de creación, aunque transcurra sin cruzarse con ser humano alguno, solo es posible como colaboración, como proceso de disolución en el que desaparezco por completo como sujeto individual y mis límites se vuelven difusos.

Impartes cursos habitualmente…¿Cómo enfocas el trabajo en ellos…? ¿Cuáles son los objetivos?
Para empezar procuro que los asistentes entiendan que aquello no va de una que dice cómo se hacen las cosas y los demás obedecen sino de trabajar juntos para descubrir algo que nunca sabemos de antemano qué será, solo sabemos que lo que nos une es el interés por todo lo que tiene que ver con la creación escénica. A partir de ahí, lo que pase dependerá de las necesidades concretas de las personas que formen el grupo. Yo no tengo nada que enseñar a nadie, lo que tengo es una experiencia que compartir y lo hago con sumo placer. En cada caso trato de encontrar la manera que más le aproveche al interlocutor pero siempre hay un espíritu común; algo que tiene que ver con desterritorializar, con abolir fronteras y sobre todo con ampliar el punto de vista sobre el hecho escénico.

¿Cómo ves el panorama de la danza en nuestro país?¿Qué colectivos te interesan?…
¿El panorama de la danza? ¿Existe tal cosa? Puedo decirte que si miro a los artistas se me llena el corazón de amor y entusiasmo, si miro a los agentes del Régimen (ministros, programadores, directores artísticos, directores generales, consejeros, concejales) se me encoge tanto que me invade la náusea.
Me interesan particularmente los colectivos de jóvenes que han recibido inputs bien diferentes a los míos. Gente que al crecer en un mundo que se tambaleaba y en el que a nadie le importaba un carajo lo que viniera detrás han tenido que buscarse la vida no solo para hallar respuestas sino – y sobre todo- para encontrar las preguntas. Personas que han llegado a interesarse por lo escénico no como oficio o profesión -o no sólo- sino como parte de un proceso de subjetivación.

¿Qué temas o propuestas te seducen a la hora de poner en pie un proyecto?…
Persigo lo que desconozco, lo invisible, lo que en primera instancia parece imposible. Dependiendo de la ocasión, le pongo un nombre u otro pero a estas alturas la dirección está bastante clara.

Háblanos del proyecto que presentas en el Festival de Otoño a Primavera.
Por todo lo que he venido respondiendo hasta aquí creo que conviene aclarar es que lo que presento no es un espectáculo de danza. Yo no tengo ningún interés en establecer la diferencia entre disciplinas porque lo que hago no responde a ninguna pero en este caso, digamos que la pieza dialoga con el teatro. En concreto con el repertorio universal. Se trata de una propuesta basada en los Acreedores de Strindberg en cuyo título he introducido un guión (A-creedores) para no llamar a engaño haciendo creer a nadie que va a ver representado el texto del autor sueco tal cual, a la manera tradicional. Ese guión que desvía el sentido de la palabra también desvía el curso de la obra. Y cuando nos desviamos solemos acabar en un lugar distinto al previsto. A-creedores es un intento de plantarle cara al repertorio. El repertorio es esa instancia característica del patriarcado que designa las obras que deben formar parte del relato oficial de la historia. El repertorio pertenece al mundo de los hombres y de las pollas y August Strindberg es una de las figuras que más me interesan de ese mundo. El reto principal que me ha planteado este intento ha sido encontrar la manera de plantarme frente a la autoridad patriarcal y decirle: “tus preguntas no son las mías, no te atrevas a intentar secuestrarme en tu subjetividad, tus malentendidos son tu tumba y te has metido en ella solito así que tú verás cómo sales… Mientras haces tus cosas yo te espero en la fiesta. ”
No quiero des-velar nada más porque adoro los secretos y porque lo que propongo es una experiencia estética; algo que no se puede apresar ni aprehender ni comprender a través de las palabras. Solo diré que si estamos hablando de esto es porque Fernanda Orazi, Pablo Messiez y yo queríamos hacer algo juntos y la cosa acabó tomando estos derroteros.

¿Cómo está afectando los recortes y el aumento del I.V.A. a tu trabajo?…
Supongo que los que nunca hemos tenido nada más que nuestra imaginación para inventarnos y nunca contamos con papá estado para llevar a cabo nuestras tareas, lo acusamos de manera diferente que aquellos que dieron por sentado que su lugar en el mundo tenían que facilitárselo las autoridades competentes. Yo nunca he pedido permiso para hacer lo que hago y ni voy a dejar de hacerlo ni pienso participar en los debates estériles que el Régimen nos lanza cual cebos para que acabemos por abandonar la que en verdad es nuestra tarea. La cuestión de la cultura y el arte no tiene tanto que ver con el IVA y con todas esas patrañas con las que se entretienen tanto los medios oficiales.

¿Se pueden plantear propuestas arriesgadas hoy?…
Respondo con una cita: “… yo me pregunto en qué pensará la gente cuando dice que un trabajo es arriesgado. ¿A qué riesgo se refieren?, ¿al de que nunca más te programen en una sala?, ¿al de dormir debajo de un puente? ¿o al de que te de un infarto del subidón? ¿Cual les parecerá más grave?».
Yo no tengo miedo a hacer mi trabajo. Me siento responsable de decir y hacer ciertas cosas y no me pesa. Hago lo que hago, por amor. No me puedo hacer cargo de ansiedades ajenas y menos de aquellas producidas por la sumisión a la subjetividad heteronormativa, patriarcal, burguesa y decadente. Cada una elige de qué es esclava y yo lo soy de otras cosas pero no del miedo. Por otra parte, no concibo la creación sin riesgo. Sería como follar si cuerpo o algo así. Para mi no solo se puede sino que se debe.

¿Qué le pedirías a las Instituciones Culturales para la cultura?…
Que desaparecieran discretamente cuanto antes.

¿Qué espectáculo de danza has visto últimamente que te haya interesado? ¿Por qué?…
Este tipo de preguntas me acojonan porque no me fio de mi memoria y porque odio un poco confundir las cosas con los nombres. Suelto lo primero que me viene a la mente: me ha interesado mucho FLACO-MEN de Israel Galván. Me parece un ejemplo extraordinario de rigor en la creación y de generosidad con las personas que van a verle. Finalmente, el hecho teatral más simple –y al que más atención presto yo- es el encuentro con las personas que llenan un teatro y ahí es donde se juega todo. Israel ha encontrado la manera de hacer de ese encuentro una especie de oportunidad para la revelación, para explorar ciertas experiencias físicas que solo pueden darse en el teatro.
25 de marzo de 2015 | Categorías: COREÓGRAFOS Y BAILARINES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: Acreedores de Strindberg, August Strindberg, Claudia Faci, FERNANDA ORAZI, Festival de Otoño a Primavera, FLACO-MEN de Israel Galván., José Luis Pardo, pablo messiez, Roland Barthes | Deja un comentario
¿Cómo ha sido el proceso de adaptación de la novela al ballet?…
Cuando era un chico de quince años leí la novela y me fascinó, me pareció universal. Pasó el tiempo y llegó el momento en que quise hacer un ballet con ella. Era muy importante elegir bien la música…En la película de Visconti y en la ópera se han realizado versiones muy personales y no quise inspirarme en ellas, preferí retomar la novela original. Al volver a leerla sentí un impacto importante, vi de nuevo que es un texto intelectual, para mí no es solo una historia sentimental. Creo que en ella se posiciona al artista frente al arte. Aschenbach era muy preciso…él mismo se vio en una situación similar a la que describe en la novela. Lo complicado era elegir bien la música. En el film se usa la música de Mahler y todo el mundo me preguntaba si la iba a utilizar yo, pero nunca lo pensé. Siempre imaginé a Bach por la precisión y claridad de su obra. Tras reflexionar mucho creí que no era la música apropiada pero leí que Bach había compuesto una obra para el personaje de Federico el Grande, algo que estaba también en la inspiración de la novela… El anhelo y el deseo… Descubrí también que Richard Wagner fue el modelo que también inspiró al autor. La música de Tristán e Isolda me resultaba interesante…Finalmente hice un collage con Bach y Wagner… Para mí era necesario descubrir como trasladar una obra de palabras a un mundo sin ellas…Pensé sobre qué sentiría el autor antes de que llegasen las palabras…Finalmente lo trasladé a un coreógrafo famoso en crisis…

¿Es un espectáculo autobiográfico?…
No es biográfico. Debo decir que las traslación de todos los personajes que creo en mis obras son, de algún modo, alter ego mío porque si no, no podría crearlos.

¿Hay alguna escena que haya creado y no esté en la novela?…
Hay que entender que la danza es una forma humana no realista…En el texto solo hay contacto visual entre los protagonistas pero si se piensa en el diálogo interior que hay detrás de las palabras, podemos imaginar que hay un contacto emocional que yo he intentado mostrar en el dueto en la playa. La danza va más allá de la forma natural de moverse. En el último dueto también he tratado de ir más allá de la imagen que expresa. Si miráis la foto del programa de mano puede surgir la pregunta de si este momento ocurrió o solo pasó en el alma del autor.

¿Cuánto tiempo hacía que no venía el Ballet de Hamburgo a España?..
Desde 2003 que vinimos con Niyinski al Teatro Real.

¿Qué proyectos tiene para el Ballet de Hamburgo?…
Podría escribir un libro sobre esto…Para mí, lo importante es que la Compañía sigue, pronto hará cuarenta y dos años que la dirijo…Es un río que sigue y fluye, siempre es el mismo y siempre sigue. Es un grupo de artistas que se unen porque tienen el mismo concepto del arte: La danza es una expresión humana. Cada integrante aporta su experiencia personal, no hay una idea de virtuosismo. Estamos reponiendo una pieza y en los ensayos técnicos, aunque no tendrían que estar algunos de los integrantes, todo el mundo espera hasta el final para recibir las anotaciones sobre los ensayos. Entienden que son unos privilegiados al realizar un trabajo como este…Eso es ser artista.

¿Tiene en cuenta hacer obras de diferentes estilos para el repertorio de la Compañía?…
Soy un coreógrafo de gustos variados. En España hemos presentado Cascanueces en una adaptación mía… Una Compañía tiene que introducir diferentes estilos, aunque lo más importante es mostrar la humanidad a través de la danza, independientemente del estilo, lo importante es la honradez y lo vivo que este esa obra en cada momento, da igual si son creaciones clásicas o mías.

18 de marzo de 2015 | Categorías: DANZA, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: Ballet de Hamburgo, Federico el Grande, John Neumeier, Richard Wagner, Tristán e Isolda | Deja un comentario
¿Cómo surge el proyecto de El buscón?…Háblanos de la adaptación y del montaje…
Todo nace de una charla con los compañeros de la compañía en torno a la picaresca… la importancia de Sevilla en la picaresca del siglo de oro… y charlando… charlando… apareció la posibilidad de hacer un espectáculo sobre la picaresca. Cuando ya lo tomamos en serio, decidí inclinarme por hacer una versión de El Buscón. La versión de la novela de Quevedo me llevó tiempo… fue un trabajo arduo… de seleccionar, dramatizar… Y sobre todo centrarme en el juego de contar las aventuras del pícaro Pablos desde dos épocas, que se fueran alternando: el siglo XVII y la actualidad.

¿Hubo ocasión durante el proceso para que los actores aportasen ideas en el texto o en la puesta en escena?…¿Cómo ha sido el trabajo con ellos?…
Sí, siempre trabajo de una forma muy abierta, muy receptiva a cualquier idea, planteamiento, sensación, no sólo de los intérpretes sino de todo el equipo. Aunque el que más corta texto y modifica soy yo, a veces con dolor de los actores.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que has partido para crear esta obra?…
Inicio los trabajos muy codo con codo con el escenógrafo, en este caso con Curt Allen Willmer. Necesito un espacio… encontrarlo. En mi trabajo diferencio muy claramente lo que es escribir, la dramaturgia, que es una cosa, y otra muy diferente lo que es la puesta en escena. Mientras escribo no me hago ninguna idea, ni espacial, ni de dirección… Llego virgen y sin planteamientos previos a la hora de enfrentarme a la dirección. Aquí, miramos muchos cuadros de la época… por otro lado iba almacenando materiales de prensa actuales que eran referentes… Total: un gran cajón de papeles.

¿Por qué haces teatro?…
Porque siendo niño probé, como un juego, esto del teatro, me fascinó, me enganchó y ahora sobrevivo con este mono diario.

¿Qué balances haces de tus trabajos como director-autor de teatro?…
Hay de todo, como en la viña del señor. Lo que sí es cierto que en cualquier trabajo me entrego, hasta enamorarme de él, y luego intento dar lo máximo, lo mejor de mí. Siempre he dicho que no hay trabajos pequeños ni grandes, ni los de presupuestos mínimos o los desmesurados. Hay dignidad. La profesión la dignificamos nosotros con la entrega de nuestro trabajo y lo mejor de nosotros mismos. Me curtí haciendo teatro popular por pueblos y aldeas de Andalucía y ahí en la base es donde…

¿Qué función crees que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?…
Creo que debe abarcar un amplio abanico. Desde el mero entretenimiento, hasta historicista, pedagógico, revolucionario, documental, familiar, popular, político, de actualidad… etc. etc. No le pongamos vallas.

¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
Mal. La política teatral en España es nefasta. El IVA ha sido puñalada en ojo de tuerto.
¿Qué obra de teatro has visto últimamente?¿Qué te pareció?…
Hace dos días, en el teatro Central de Sevilla, Ruz-Bárcenas. Me encantó. Me gusta ese teatro documental tan despojado donde la palabra y los magníficos actores te llevan. No es teatro para emocionarte, no puedes, porque la sangre se te hiela.

¿Proyectos?…
El más próximo Hamlet. Con la misma compañía que está representando El Buscón. Teatro Clásico de Sevilla.

¿Cómo ves la situación teatral en nuestro país?…¿Se pueden hacer propuestas combativas hoy en día?…
La situación teatral está difícil. Creo que estamos en un gran momento (quizá uno de los mejores de la historia de nuestro teatro) de creadores: Actores / actrices, autores, escenógrafos… disponemos de una buena red de teatros. Cada día se abren nuevos teatros de bolsillo… Se buscan alternativas de todo tipo… Pero nos falta un mayor apoyo institucional, una ley de teatro, otra de mecenazgo y… sobre todo recuperar y atraer público. El caballo de batalla es el público.
Respecto a la segunda parte de la pregunta: Sin dudarlo. Es forzoso ser combativo en estos tiempos de confusión y manipulación. Al menos que el teatro aporte algo de luz a la oscuridad.

11 de marzo de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: Alfonso Zurro, Curt Allen Willmer, El buscón, hamlet, Ruz Bárcenas, Teatro Central de Sevilla, Teatro Clásico de Sevilla | Deja un comentario
¿Cómo surge el proyecto que presentáis en el Teatro Lara…?…Háblanos del proceso y del montaje…
Aprovechando nuestra visita a España con motivo de una presentación en la gala drag de Las Palmas no podíamos irnos sin hacer un montaje especial en Madrid y que mejor teatro que en el Lara y acompañados de elenco español, parte de él pertenece a nuestra producción de Noc un auténtico vodevil.
¿Cómo ha sido el proceso de creación?… Crazy es una recopilación de cuadros nunca presentados en España junto con alguno de nuestros clásicos con un particular y sorprendente hilo conductor.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que habéis partido para crear esta puesta en escena?…
Mucho humor Quintana, un espectáculo musical muy divertido
¿Por qué haces teatro?…¿Cómo fueron tus orígenes en el mundo del espectáculo?…
Por pasión. Todo empezó como un juego con mi hermano y con el paso de tiempo lo profesionalizamos hasta llegar hasta hoy …20 años más tarde.

¿Qué balances haces de tus trabajos como director?… ¿Cómo surgió NOC?…
Es un trabajo muy laborioso y satisfactorio ver luz las ideas y creaciones. NOC surgió de la inquietud de realizar un montaje de sello Quintana en España para dar visibilidad a nuestro trabajo y proponer un género no muy explotado por estos lares.

¿Qué función crees que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?…
Es fundamental el aportar cultura, aire fresco y divertimento a una sociedad.
¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
El aumento del IVA es un auténtico maltrato al sector y esperamos reconsideren la bajada de nuevo para dinamizar la cultura.

¿Qué obra de teatro has visto últimamente?¿Qué te pareció?…
Entre las propuestas últimas vistas me sorprendieron La llamada y Las amistades peligrosas.
¿Se pueden hacer propuestas combativas de teatro hoy?…
No hay que dejar de proponer y sorprender…se vienen aires nuevos…Y hasta ahí podemos leer…

9 de marzo de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: Crazy, David Quintana, los quintana, NOC | Deja un comentario
¿Cómo surge el proyecto de Alma…?
Alma es un proyecto que lleva mucho tiempo dentro de mi cabeza, y mucho tiempo de vida muy presente, la primera vez que me lo plantee pienso que era demasiado pronto y que quizás no estaba preparado para afrontarlo, y que quizás no era el momento mas oportuno para poder arrancarlo, además el montaje era demasiado para nosotros (Nada en la nevera) así que teníamos que encontrar aliados, en nuestro inicio como compañía era difícil encontrar estas alianzas, así que una vez que Confesiones a ala comienza a crecer y a ir haciéndose hueco en la escena teatral, esto fue algo mas fácil, y así conseguimos esa ansiada alianza, y se cruzo en el camino Es. Arte y la productor María Allas, quien firma la producción de este proyecto y que sin ella esto no hubiera sido así real.

Háblanos de la adaptación y del montaje…
La adaptación estaba escrita desde antes que confesiones, pero claro me toco sacarla del cajón y volver a trabajarla prácticamente de cero, ya que no me funcionaba como la primera vez que me lo plantee, la verdad es que estoy muy contento con el resultado final y con las cosas que fui encajando, y sobre todo con mi particular versión, mas bien visión de lo que es y significa para mi esta película, cada vez que avanzaba en el texto veía la necesidad de ir integrando partes y hacer guiños a otros autores y a otras piezas teatrales, así que dentro de Alma encontraremos alguna que otra sorpresa, que no están en “Persona”, en cuanto al montaje un reto, un gran reto para mi, ya que finalmente es mi particular visión y de mi propio significado tanto personal como profesional de quizás para mi la obra maestra de Bergman. Así que imagínate lo que ha sido para mi transformar esta pieza tan visual como es, poder dotarla e integrarla dentro de un escenario, y a esto sumarle el mundo de Bergman y toda la base y lo importante de esta película (que es todo o casi todo), y dotarlo del mío particular y conseguir que estos queden unidos.

¿Cómo ha sido el proceso de creación?…
Lleno de facilidades, por todos los lados, empezando por la productora María Allas que únicamente me fue facilitando y trazando cada uno de los caminos por los que ir transitando, su ayudante Paula que esta en todo y con todo, los chicos de Nave73 Roció, Álvaro y Alberto que han sido fantásticos en todo el proceso de ensayos, con Sergio Lardiez… Buuffff que decir de este genio “Eres un Dios” magia pura, poder volver a trabajar con mis socios de Nada en La Nevera, Ana López Cobos que vuelve a firmar el vestuario en esta obra, y Jon Corcuera que diseña también la Luz de Alma… en este montaje he tenido la suerte también de contar por primera vez con Juan Divasson director de Arte de “Stockholm” y gran amigo, y que firma la escenografía de la obra, Beatriz y todo el equipo de Making Off Hair que trabajaron la peluquería de las chicas, y María José Barta costurera de unas piezas maravillosas diseñas por Ana López Cobos. Luego sumar el equipo ya habitual en mi primer montaje Lydia Ruiz mi ayudante, y Estaban Ruiz sonidista con el que no voy a ninguna parte sin el, y por ultimo poder volver a contar y rencontrarme con Chon López técnica de luces de la obra que colaboro también en Confesiones… y en piezas audiovisuales mías.

¿Cómo ha sido el trabajo con las actrices?…
La verdad es que ha sido un proceso, duro y complicado, bueno todo proceso creativo lo es, pero poco a poco fuimos encontrando el tono y la forma, la verdad que fue muy pronto, y por fortuna ellas me lo pusieron muy fácil desde el primer momento, no teníamos mucho tiempo para poder realizar un buen trabajo previo de mesa y de investigación, así que en cada ensayo estábamos en ese camino el de investigar y encontrar, trabajar con Rocio Muñoz-Cobo la verdad es que ha sido todo un descubrimiento para mi, y es una actriz con un talento impresionante, en cada gesto, en cada mirada, esta lleno de palabras… con Andrea Dueso pasan cosas muy similares tanto con su mirada, como con sus pequeños momentos de silencio, ya que es la que lleva todo el peso de la obra a través de su palabra, creo que su interpretación y aceptación del personaje ha ido creciendo poco a poco, fue un proceso lento y delicado, dadas las aristas y las complejidad del personaje, pero creo que fuimos cosiendo con un hilo muy fino y delicado cada costura de Alma y que conseguimos llevarla un punto muy interesante y mágico, sin lugar a dudas creo que finalmente el traje que logramos confeccionar del personaje esta realizado totalmente a la medida de Andrea. Luego esta Cristina Masson que creo que tengo que meter dentro de este apartado, que es la coreógrafa y bailarina en este montaje, y que ha sido para mi todo un descubrimiento, desborda arte por los cuatro costados, es pura magia, es pura felicidad, es pura alegría en cada momento en el que esta presente.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que has partido para crear esta puesta en escena?…
Referentes creo que están por todos los lados en esta película, obviamente y partiendo de la base de la propia película… además en este montaje mezcle referentes que nada o poco tienen que ver con Bergman, empiezo quizás por el que si “La Mas Fuerte” de Strindberg. Los que no, o poco o nada pues esta mi particular versión de una pequeña pieza de Electra quizás con algún tinte Lorquiano, La Violación de Lucrecia de William Shakespeare unido a la danza contemporánea, la escenografía que tiene muchas referencias a Dogville, por otro lado también en una pieza audiovisual que ha sido montada y creada por una de mis mejores amigas Saray Oñate, y que es una pieza muy importante que esta dentro de la obra esta llena de todas las influencias tanto visuales como pictóricas de la obra, pero quizás y sin lugar a dudas una de las grandes cosas que me pasan en este montaje es poder integrar un poema de mi idolatrado Jim Morrión, esto sin lugar a dudas es una de las cosas con las que estoy mas feliz en este montaje ya que fue su música la que me acompaño en grandes momentos del proceso de adaptación de esta obra.

¿Por qué haces teatro?…
Al principio y con mi primer montaje Confesiones a Ala,tenia un miedo terrible ya que mi experiencia siempre había sido en el mundo audiovisual y tenia mucho respeto y miedo al teatro, pero después de esa experiencia y de mi primera experiencia… solo pasa por mi cabeza hacer teatro, es algo mágico, creo que no podría poder expresar en esta entrevista todas las partes de mi que se activan en cada montaje. Es un vicio, es una gran droga…

¿Qué influencia tiene el cine en tu teatro?…
Mucho, ya que mi formación es audiovisual. Así que esta muy presente en cada montaje, además siempre integro piezas audiovisuales en cada montaje.
¿Qué balances haces de tus trabajos como director?…
Sinceramente creo que esta pregunta no la debería contestar yo, quizás sea escurrir un poco el bulto, pero creo y muy sinceramente que tendrían que ser mas las personas con las que trabajo y colaboro, o el publico que ve mis montajes y mis trabajos.

Háblanos del proyecto y puesta en escena de Confesiones a Alá…
Pues que contar de confesiones que no haya dicho ya en todo este tiempo, que contar mas de un montaje que me ha abierto las puertas a seguir creyendo en mi profesión y sobre todo a seguir amándola como la amo hoy en día, sin lugar a dudas Confesiones… me devolvió a la vida, y del montaje y de Confesiones… en si es todo pura magia tanto todo lo que sucedió en la puesta en marcha como cada día y cada función.

¿Qué función crees que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?…
La misma que me propuse cuando me decidí a dar el paso, entretener, divertir, emocionar, hacer pensar a las personas y quizás para mi el mas importante que logren desconectar de sus problemas por un instante, y de todo lo que sucede en nuestro entorno y que no es poco lo que sucede día tras día en nuestro país, y no solo aquí en el mundo en el que vivimos.
¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
Mucho, mucho, mucho, mucho… vamos que es insostenible no solo en el teatro, si no en el cine, en la danza, en la pintura, vamos… a todo el sector cultural, afecta en todos los aspectos, la no creación de empleo, cierres de productoras, cines, espacios teatrales como por ejemplo el siempre querido y adorado Garaje Lumiere, y no solo en Madrid en toda España es muy triste este maltrato al que estamos sometidos, es muy triste solo pensar las personas que pierden su trabajo, los proyectos que se quedan en el camino y que nunca llegaran a verse, los lugares que están desapareciendo, pero sobre todo es muy triste vivir en un país en el que la cultura tiene un 21% y el porno un 4% creo que esto ya lo dice todo.

¿Qué obra de teatro has visto últimamente?…
Las Heridas del Viento de Juan Carlos Rubio, su ultimo día en el Teatro Lara.
¿Qué te pareció?… Un ejercicio maravilloso, lleno de magia, tanto actoral, como de texto, como de dirección, lo que hacen Kiti Mánver y Dani Muriel en esta obra y con este texto es una verdadera salvajada.

¿Proyectos?…
Soy todo oídos… no en serio, pues ahora mismo esta Alma y espero poder estar mucho tiempo y que tenga una larga vida, Confesiones… continua en el Teatro Lara todos los miércoles y ahora esta empezando a salir los fines de semana por diferentes ciudades de España, y no hace muchos días Marta Nieto me hizo llegar un texto que estoy empezando a verlo con muy buenos ojos y que ahora mismo poco mas puedo decir sobre el, ya que seria aventurarme un poco y tiene que ir todo poco a poco, pero bueno podría ser lo siguiente, por que no, también tengo una cosa que otra en el fondo del cajón de la mesa de mi escritorio pero es muy pronto quizás para poder hablar ahora de ellas.

¿Se pueden hacer propuestas combativas de teatro hoy?
Claro que si, levantar un proyecto a día de hoy ya es una propuesta combativa a este gobierno y al propio estado.
6 de marzo de 2015 | Categorías: AUTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: "Las heridas del viento" de Juan Carlos Rubio, Ana López Cobos, Andrea Dueso, Arturo Terón, “La Mas Fuerte” de Strindberg, “Stockholm”, Chon López, Confesiones a Alá, Cristina Masson, Dani Muriel, Dogville, Estaban Ruiz, GARAJE LUMIERE, Jim Morrión, Jon Corcuera, Juan Divasson, Kiti Manver, La Violación de Lucrecia de William Shakespeare, Lydia Ruiz, Making Off Hair, María Allas, María José Barta, Marta Nieto, Nada en la nevera, Nave73, rocio muñoz-cobo, Saray Oñate, Sergio Lardiez, teatro lara | Deja un comentario
¿Cómo surge el proyecto que estrenaste en el Teatro Español?…Háblanos del texto y del montaje…
Desde hace 30 años estoy haciendo un monologo sobre Oscar Wilde que llevé por medio mundo incluyendo el Festival de Edinburgo. Pero ahora con mi propia experiencia de la vida, sus altas y bajas, me di cuenta que Wilde hablaba sobre cosas muy profundas sobre el comportamiento del ser humano. Me di cuenta que no obstante sus obras nos hacen reír por su frivolidad, la grandeza de él es en su gran humanidad. Y eso es lo que quería comunicar en Beloved Sinner. El texto tiene mucho de Wilde pero también hay mucho de mi tanto en el contenido que en mi interpretación de Oscar. Como cualquier papel me gusta que el público no sabe donde esta Oscar y donde esta Denis en el personaje.

¿Cómo ha sido el proceso de creación?…
La obra estaba creciendo dentro de mí durante años. Y de repente no podía dejarlo más sin darle forma y finalmente una representación por delante de un público. He hecho mucha investigación sobre Wilde durante sus últimos años de vida, a través de lo que el mismo decía y escribía y lo que decía sus amigos e incluso sus detractores. Por encima de todo quería ser justo con él y no tapar tampoco sus errores y debilidades. Hacerlo diferente hubiera sido una traición de él y de mi mismo.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que has partido para crear esta puesta en escena?…
Antes de todo quería hacerlo minimalista para no distraer al publico de la esencia de Wilde y sobre todo, de la belleza y sabiduría de sus palabras. Las hojas de otoño son de mi jardín y era una decisión por accidente. Mientras estuve sentado en un banco al aire libre cayo una hoja roja, más que cayó fue flotando hacia mí y me inspiró. Otra decisión muy importante era sobre la caracterización de Wilde. No tengo pinta de Wilde para nada y poner maquillaje hubiera quedado en caricatura y en el ridículo. Entonces confiaba en el poder de mi interpretación, es decir, conseguir que el público se olvide de las apariencias para enfocar solo en los sentimientos y espíritu del personaje.

¿Por qué haces teatro?…
Nací actor; no puedo evitarlo. Es un don que no puedo ignorar. Me siento vivo cuando doy cuenta que por algo estoy aquí en este mundo. No hay nada más vital que escuchar las risas, los sollozos, la respiración de un público sea en China, España, Irlanda o cualquier otro país.

¿Qué balances haces de tus trabajos como director y actor de teatro?…
Creo que en los muchos años que llevo trabajando en España he aportado algo diferente a los escenarios españoles, no digo mejor o peor, pero si diferente. Normal… ¿no?. Soy un actor formado por tres culturas, el irlandés, el inglés y el español. Cada una me ha influido de una manera fuerte, única y original. Entonces cuando hago un Calderón o un Shakespeare lo hago con ojos de un irlandés; y cuando hago un autor irlandés estoy influido por mis experiencias en España. Como actor siempre he tenido que romper cualquiera barrera de idiomas; por eso me concentro en las emociones, porque son universales. Y como maestro de actores comparto mis ideas con la inocencia y alegría de un niño.

¿Qué función crees que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?…
El teatro es, y debe ser, fundamental para cualquier sociedad. En la historia universal y desde tiempos antiguos siempre ha sido así. Es un instinto natural del ser humano. Durante los primeros años, los niños hacen teatro. El teatro es una de las puertas hacia la felicidad, la espiritualidad y lo sentimental del ser humano. Es un lenguaje que rompe barreras y que puede también romper perjuicios. Nos hace pensar, contemplar y comprender las cosas más profundas de la vida. Perderlo es un riesgo que no podremos permitir.

¿Cómo crees que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
Después de decir lo que acabo de decir sobre la importancia del teatro puedes imaginar el disgusto que tengo por la locura de la I.V.A. actual en España sobre un arte y un instinto natural de cualquier ciudadano. Incredulidad ante unos políticos tan insensibles. Me preocupa que toda una generación de actores, autores y directores estén sufriendo tanto por su arte y por la ignorancia de unos pocos.

¿Qué obra de teatro has visto últimamente?¿Qué te pareció?…
Vicky Peña en Long Day’s Journey into Night de O’Neill. Genial, es una gran actriz.
¿Proyectos?…
Nada más volver después de Navidad he escrito y dirigido una obra sobre Teresa de Ávila que se estrena hoy sábado en la Iglesia de Santa Teresa en Ávila. Y he de hacer una gira con Beloved Sinner. Pero un proyecto que tengo en mente desde hace tiempo es escribir un libro sobre el teatro.

¿Se pueden hacer propuestas combativas de teatro hoy?…¿Qué les dirías a las nuevas generaciones del teatro?…
El teatro es un camino duro y difícil. Pero hay que seguir con ilusión. Si uno siente, en lo más profundo de su alma, la necesidad de compartir sentimientos, es un valor sin precio. Y otro consejo… Intenta no dejarte engañar por gurús falsos o profetas que engañan. La única verdad es lo que uno siente dentro de sí mismo. El mejor lugar para que un actor combata, es sobre el escenario con un buen teatro que transcienda sobre ideas parroquiales y menores.

28 de febrero de 2015 | Categorías: DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: Beloved Sinner, Long Day's Journey into Night, Oscar Wilde, TEATRO ESPAÑOL, Teresa de Ávila, Vicky Peña | Deja un comentario
¿Cómo surge vuestra peculiar manera de hacer teatro de humor…?…Habladnos de la obra que presentáis en Madrid…
Nosotros surgimos en el año 2002, en Córdoba, Argentina, tiempo de caída de gobiernos, corralitos, momentos políticamente complejos con repercusiones sociales dramáticas. La gente no iba al teatro y debimos ir a por la gente. De esa primera etapa de bares y restaurantes, llegamos recién al teatro. El humor fue un lenguaje que nos permitió transitar dicha crisis y ofrecer una lectura original, novedosa en nuestro medio, de la realidad. El espectáculo actual, Rómulo, es resultado de la evolución de tantos años. Un espectáculo de humor, poesía y reflexión como ha sido toda nuestra obra, un viaje por la alegría, acompañados por un espectador al que respetamos y no subestimamos.

¿Cómo ha sido el proceso de creación de esta propuesta?…
Los procesos son similares en cada obra: mientras se representa la obra actual, se van generando ideas, estímulos que nos guían naturalmente, a la siguiente. Mas o menos 1 año de escritura, 2 meses de ensayos y luego, a la cancha!.

¿Hay algún referente técnico o artístico del que habéis partido para crear esta puesta en escena?…
No. En cada obra debemos estar pendientes de nosotros mismos: renovarnos, mantener estilo sin repetirse, sorprender.
¿Por qué hacéis teatro?…¿Cómo fueron vuestros inicios?…
Alejandro ha tenido vocación desde niño y yo, Pedro, he llegado más tarde; una vocación tardía, de las que también existen.

¿Qué balances hacéis de vuestros trabajos hasta el día de hoy?…¿Cuál ha sido la evolución de la compañía a lo largo de estos años?…
Los comienzos te los he comentado. De ese primer año, pasamos al teatro en Córdoba y, al año siguiente, nos radicamos en Barcelona, con una maravillosa repercusión. Se nos ha reconocido con diferentes premios durante nuestros casi cuatro años de estar allí. Luego nuevamente Argentina con giras por Sudamérica. Siempre hemos sido respetados artísticamente, con críticas maravillosas. Hemos podido vivir dignamente de nuestra profesión.

¿Qué función creéis que ha de tener hoy el teatro para la sociedad en la que vivimos?…
El actor es individuo de su tiempo y como tal, intenta dar desde su lugar de trabajo, con humildad y firmeza, su lectura de la realidad, su compromiso solidario con el otro, su deseo de vivir, naturalmente, en términos de igualdad, de respeto y admiración el acto mínimo y máximo de estar vivos.

¿Cómo creéis que está afectando la subida del I.V.A. y los recortes al teatro en España?…
Afectan negativamente a la producción y por lo mismo, la realización de las obras. Dramáticamente.
¿Qué obra de teatro habéis visto últimamente?¿Qué os pareció?…
He ido a ver a Ron Lalá, en el Festival de Olite, su obra «En un lugar del Quijote». Noche de verano, Castillo de Olite y Ron Lalá y su versión libre de Cervantes: una maravilla!.

¿Proyectos ‘…
Luego del fin de gira, quedan algunos bolos por nuestro Sur y… a seguir navegando.
¿Se pueden hacer propuestas combativas de teatro hoy?…
Sí; lo hemos sugerido en respuestas anteriores. El actor combate, desde su lugar de batalla, la falta de justicia, la mediocridad; reivindica la esencia, el aire para oxigenar, el agua para purificar. Exige, desde la metáfora de su obra, DIGNIDAD. Y, en nuestro caso, con humor, poesía y reflexión.

13 de febrero de 2015 | Categorías: ACTORES, DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: En un lugar del Quijote, Festival de Olite, Los Modernos, Pedro Pavia, Rómulo, RON LALÁ | Deja un comentario
¿Cómo fueron tus inicios en el teatro?.. Muy divertidos, en la escuela de teatro lo pasamos fenomenal y en nuestro primer colectivo teatral, Akratea Anemosa allá por los ochenta, todo fue una fiesta.
¿Por qué haces teatro?… Por despistar a la realidad.
¿Tu función en el teatro lo has compatibilizado con otros trabajos?… No ha hecho falta siempre he trabajado en esto.

¿Qué balance harías sobre trayectoria?…
En el teatro siempre se empieza, yo llevo treinta y dos años y estoy empezando.
¿Cuál ha sido la evolución del Teatro del Temple?…
Empezamos como compañía independiente, con un estilo mas personal y vamos creciendo hacia una estructura mas compleja donde la coproducción y la colaboración con otras empresas es primordial. Ahora somos también co-gestores de un espacio escénico integral, El Teatro de las Esquinas, de Zaragoza, con 500 butacas que se convierte en auditorio para 1000 personas, cuenta también una escuela de mas de trescientos alumnos, servicio de restaurante y cafetería. Es nuestra tercera temporada y estamos satisfechos.

¿Qué diferencia hay para ti del teatro que se hacía en tus principios al que se hace hoy en día?… El teatro en los ochenta era mas orgánico, mas impulsivo, basado en intuiciones; ahora se meditan mucho mas las propuestas y se tiene mas en cuenta al espectador.

¿Cómo surgen las ideas de los proyectos que se ponen en marcha en la Compañía?…
Las ideas vienen de muchos lados, unas responden a necesidades personales y creativas, otras son fruto de propuestas externas y otras surgen de del afán de colaborar con otros colectivos.

¿Ha sido importante tener unos colaboradores habituales en los equipos artísticos y técnicos?… Fundamental, las tareas tiene que estar repartidas y cada uno tiene que especializarse en su área, sin perder nunca la capacidad de coordinarse con el resto.
¿En qué proyectos has participado durante el último año?…
He dirigido la puesta en escena de Ricardo III para el Teatro Español, de DAKOTA de Jordi Galceran y Arte de las putas , adaptación de José luis Esteban, ambas para Teatro del Temple.

Háblanos de Ricardo III y de la obra que estrenáis en el Fernán Gómez…¿Cómo surgieron?…¿Cómo ha sido el proceso?…
RicardoIII ha sido un proyecto emocionante, hemos hecho una gran familia entre todos los actores y el equipo técnico, además el publico ha respondido llenando el teatro en todas las funciones. Hace mas de veinte años que Juan Diego y yo hablábamos de trabajar juntos y al final el sueño se ha cumplido.
En el Fernan Gomez presentamos Arte de las Putas, «una historia de amor». Es una propuesta de José Luis Esteban, actor con el que llevamos muchos años colaborando. La adaptación del texto de Nicolás Fernández de Moratin nos pareció una idea sugerente e ingeniosa y decidimos apoyarla desde la dirección artística y desde la producción.

¿Qué proyectos tienes entre manos?…
Lo más próximo una coproducción entre Teatro del Barrio, La Rambleta y Teatro del Temple: Las Guerras correctas, escrita y dirigida por Gabi Ochoa. Tenemos tres proyectos en preparación, pero hasta que no se concreten no podemos hablar de ellos. Entre tanto sigo con la dirección artística del Teatro de las Esquinas y de Teatro del Temple.
¿Hay algún proyecto que nunca pudiste realizar y te gustaría?…
Creo que mis sueños se han ido cumpliendo. Quizá la ópera es el deseo pendiente.

¿Cómo crees que están afectando los recortes y el aumento del I.V.A. a los proyectos de teatro?… Los proyectos de teatro salen adelante porque los artistas se dejan la piel en ellos, la calidad sigue siendo alta, el publico sigue apoyando, pero las resistencia del sector a unas condiciones tan penosas económicamente pesan mucho. Esta situación tiene que resolverse, no tiene ningún sentido, la cultura es un valor que define la identidad de un país y además genera riqueza.

¿Qué montaje que hayas visto últimamente, te ha interesado?…¿Por qué?…
El Misántropo, por su dinámica escénica y su originalidad dramaturgica.

¿Alguna sugerencia para seguir creando y haciendo teatro en tiempos de crisis?…
Hacer, no parar, colaborar, hasta que superemos la crisis, como el cuento de la rana y la mantequilla.

2 de febrero de 2015 | Categorías: DIRECTORES, ENTREVISTAS | Tags: "El Misántropo", Akratea Anemosa, Arte de las putas, Carlos Martín, Dakota, El Teatro de las Esquinas, Gabi Ochoa, Jordi Galcerán, José luis Esteban, La Rambleta, Las Guerras correctas, Nicolás Fernández de Moratin, Ricardo III, Teatro del barrio, Teatro del Temple, TEATRO ESPAÑOL | Deja un comentario
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